Reza un adagio boxístico: “con el campeón, hasta que pierda” y por ello me he decantado por el equipo de Francia para levantar la copa en Qatar. El defensor del título es el primer calificado a la siguiente ronda y lo ha hecho mostrando poderío y contundencia. Kylian Mbappé es una máquina de jugar al futbol y una fuerza desatada de la naturaleza cuando controla el balón. De su mano o de su pie mejor dicho. Los galos pueden repetir lo hecho en Rusia hace cuatro años.

México cayó ante Argentina pese a haber realizado un buen partido con base en un buen planteamiento defensivo. El problema es que si recuperas el balón a 70 metros del arco rival y además careces de un centro delantero o alguien que aguante la pelota pues será difícil inquietar a un rival que, por lo demás, tiene mucho oficio.

Veo a México en la siguiente ronda. Polonia hizo su chamba venciendo a un durísimo cuadro de Arabia. El Tri deberá hacer lo propio y para ello necesita los goles que hasta el momento no ha hecho ni ha fabricado.

Ni el arbitraje del italiano Daniele Orsato pude servir de paliativo para la derrota de los verdes.