La madre de dos de las víctimas de la balacera que se registró en mayo de 2021 en el bar Casa Bacacho, en Cuernavaca, lamentó ayer que la Fiscalía General del Estado (FGE) no tenga ningún avance en la investigación.

Hada Ramos dijo que el asesinato de sus hijos, Jorge Alonso Reyes Ibarra y Julio César Reyes Ramos, de 40 y 30 años de edad, acumula 30 meses de impunidad a pesar de que ha tocado las puertas de todas las autoridades responsables de procurar justicia en la entidad.

Todo lo contrario, declaró que los funcionarios de la Fiscalía ya no la quieren no atender, pues su respuesta siempre ha sido la misma: “no

hay ningún avance”, y el fiscal, Uriel Carmona Gándara, nunca la ha recibido.

“Ya llevamos, lamentablemente, 30 meses en la impunidad, porque no tenemos nada, pero seguimos en la lucha, buscando justicia”, dijo Hada Ramos al agregar que, como ciudadanos, tanto sus hijos muertos, como ella, tienen derecho a la verdad de lo que ocurrió la madrugada del 24 de mayo de 2021, en el bar,

que se localizaba en la avenida Río Mayo, en Cuernavaca.

“No hemos tenido ninguna reunión con el fiscal desde 2021, y a pesar de que hemos solicitado información, no hay nada, ni ningún acercamiento directo con el funcionario”, insistió.

Señaló que es importante que el caso se aclare, para que no quede en la impunidad y no se vuelva a repetir.

Lamentó que a pesar de la

tragedia que vivió su familia, ha sido doloroso también lidiar con la insensibilidad de las autoridades.

“En lugar de tener justicia, nos volvimos enemigos de todos porque ya ni nos quieren recibir y es difícil encontrar justicia”, expresó.

Considera que la probabilidad de que el titular de la Fiscalía sea relevado, abre la esperanza de que el caso se resuelva. i